La gastronomía está evolucionando más rápido que nunca. Lo que antes parecía un pequeño rincón del mercado, esas comidas listas para comer en los supermercados, ahora está desafiando a la hostelería tradicional y marcando tendencia. Cada vez encontramos opciones más prácticas, accesibles y sofisticadas. Los supermercados están conquistando a un público que busca rapidez sin renunciar ni al sabor ni a la calidad.

Hoy en día, elegir un plato preparado ya no significa sacrificar la experiencia culinaria, sino que se ha convertido en una opción atractiva para ahorrar tiempo y dinero. Según datos de Circana, los supermercados con comida preparada han subido su cuota de mercado del 21 % al 23 %, mientras que los restaurantes han bajado del 79% al 77 %. Este dato refleja un cambio en los hábitos de consumo, que aunque de momento es pequeño, se espera que vaya en aumento en los próximos años.

Por eso, varias de las cadenas de restaurantes de comida rápida más grandes de nuestro país como Goiko, The Good Burger o Juanchos BBQ se han dado cuenta de este cambio de tendencia y han llevado su experiencia a los lineales del supermercado. Esta experiencia les permite llegar a más consumidores y ofrecer una experiencia muy similar a las de sus restaurantes, pero en casa.

De acuerdo con un informe de AECOC y ShoppeReview, el 54 % de los españoles han probado estos productos, y de ellos el 60 % ha repetido compra y el 80 % asegura que volverá a comprar. Tener el sabor de tu restaurante favorito en casa nunca ha sido tan fácil.

La percepción de competencia entre supermercados y restaurantes cada vez es más evidente. Daniel Agromayor, CEO de Five Guys España, lo expresó de forma clara: “Si coges una paella preparada en Mercadona en lugar de comer aquí, eres mi competidor”. Los supermercados están redefiniendo las reglas del juego, sin embargo, hay espacio para ambos. Mientras los supermercados ofrecen rapidez y precio, los restaurantes siguen siendo sinónimo de experiencia y de momentos especiales.

Al final el gran ganador es el consumidor. Con más opciones que nunca, entre propuestas gourmet en el supermercado y experiencias únicas en los restaurantes, tiene la opción de elegir lo que mejor se adapte a ellos. Está claro que la gastronomía está en plena transformación y el futuro promete una oferta más rica, diversa y emocionante.